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El papel del detective privado en los procesos de divorcios

Los detectives privados desarrollan cada vez una parte más activa en los procesos de divorcios. Son los detectives especializados en divorcios. En momentos tan tensos, no son pocas las parejas que no se entienden a la hora de poner el punto y final a su relación, lo que suele llevar a uno de los cónyuges a recurrir a un investigador privado para avalar firmemente su posición ante el juez. Los casos que vemos de este tipo son muy variados, incluyendo desde enfrentamientos por razones económicas hasta desacuerdos por la custodia de los hijos. En supuestos como estos, las pruebas del investigador privado son fundamentales para que la balanza judicial se incline por uno u otro lado. Antes, durante y después del proceso.

Detectives y divorcios: la custodia compartida

Una de las situaciones más habituales que lleva a uno de los cónyuges a recurrir a un detective se produce cuando una de las partes -o ambas- demandan la custodia completa. Demostrar que uno es más idóneo que el otro, no puede fundamentarse en un juicio con cuestiones que suenen subjetivas, sino que deben apoyarse en pruebas reales y constatadas para que sean tomadas en cuenta por la justicia. El trabajo objetivo del detective se centra en demostrar, por ejemplo, si la otra parte es irresponsable con sus hijos o representa para ellos una amenaza física o psicológica.

De manera similar, sus servicios se utilizan también para probar que uno de los implicados miente sobre su capacidad económica, con el fin de no dar pensiones ni compensaciones a su ex pareja e hijos. En este sentido, la función del detective pasa por descubrir y aportar datos falseados ante la justicia, como ingresos no declarados.

Modificación de las medidas aplicadas por un juez

Para lograr la modificación de las medidas de divorcio, la obtención de pruebas válidas y objetivas resulta todavía más esencial, puesto que las sentencias ya han sido dictadas. En estos casos, las problemáticas más habituales que se presentan ante un detective son:

  •        Modificación de las pensiones alimenticias: Puede suceder que el ex cónyuge alegue un cambio de circunstancias que le haga imposible pagar la cuantía dictaminada. En este caso, se trata de  estudiar si es real o no la merma de ingresos, así como aportar todo tipo de documentos que demuestren que su situación no ha cambiado y que, por ejemplo, está cobrando en B u oculta rentas menores.
  •        Modificación de la custodia de los hijos: Se trata de demostrar que por algún motivo el cambio en la guarda y custodia del hijo supone una clara mejoría para el menor. Se alega, por ejemplo, que el responsable no pasa tiempo con el niño (lo deja siempre con sus abuelos o se lo impiden sus nuevas relaciones), lo deja mucho tiempo en casa solo – aunque sea por cuestiones laborales- con los riesgos que ello conlleva o miente sobre las horas que realmente puede dedicarle.

Ante estas situaciones, los detectives aportan las pertinentes pruebas sobre hechos o conductas privadas que demuestran que la ex pareja no es sincera o no asume sus responsabilidades. De ahí que muchos bufetes de abogados cuenten con detectives para llevar a buen término sus casos.

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